14 noviembre, 2024 – 2 febrero, 2025
Salas 4 y 5. Sala Philip West. Primera planta.
El jueves 14 de noviembre, a las 20.00h, la Fundación Eugenio Granell inaugura la exposición 3 descensos GZ del artista PABLO ORZA, comisariada por Eduardo Valiña y que podrá visitarse hasta el 2 de febrero de 2025.
Pablo Orza se graduó como licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca en el año 1993 y continuó sus estudios en la Universidad Politécnica de Valencia. A mediados de los años noventa trabajó en el Studio Arts Centers Internacional de Florencia iniciando su carrera profesional como artista, participando en una amplia variedad de proyectos en toda Galicia. Participa en el taller de Lucio Muñoz del MACUF y articula diversas muestras en distintas ciudades gallegas. Además inicia una carrera nacional e internacional en Italia, Nueva York y Portugal, entre otros.
La conectividad del ser humano consigo mismo y con lo que le rodea y la relación Arte/vida marca el hilo conductor de su obra. De esta forma, Orza en ocasiones planea la labor artística desde un punto de vista ritual a través de la conectividad y sus formas.
El artista se mueve en un amplio abanico de técnicas y soportes como el collage, el dibujo, la pintura, la fotografía, la escrita, las instalaciones, la escultura, la música o la performance, entre otras. Un trabajo marcado por la libertad, donde lo abstracto se funde con lo figurativo para crear un cambio en la forma de relacionarnos con el mundo.
Con referencias como Thomas Hirschhorn, Joseph Beuys, Antoni Tapies, Jason Rhoades o Cy Twombly, entre otras, el artista reformula constantemente la concepción de su producción partiendo de conceptos intrínsecos y otras aportaciones externas donde el territorio funciona como un eje de unión, en ocasiones con un detonante magnético que facilita el hecho creativo, como ocurre con el Pico Sacro.
Partiendo de la interrelación entre pintura y escultura inicia una vía de investigación que sigue hasta la actualidad, donde la tela, la madera y la palabra se fusionan en una multiplicidad de opciones que pasan por los residuos y la relación con el material industrial para aportar un universo híbrido que lo sitúa en una concepción plástica diferenciada dentro de la producción contemporánea.
Orza propone un proyecto interdisciplinar donde el territorio, la identidad y la autorreferencia convergen en un espacio de representación propio, conformando un lugar de creación apartado de lo establecido para crear vínculos, a través de una amplia propuesta con diferentes parcelas sensoriales.